Fotografías de ©Roberto Gil

El Parque Natural de Urbasa y Andía es un espacio natural dotado de un amplio conjunto de valores geológicos, biológicos, ecológicos, paisajísticos, arqueológicos y socioculturales.

El inapreciable conjunto de sus valores condujo al Gobierno de Navarra a la declaración de estos territorios como Parque Natural para garantizar su conservación en armonía con el mantenimiento de los usos tradicionales y los nuevos usos asociados al disfrute de la naturaleza.

Aralar es una cadena montañosa situada entre Gipuzkoa y Nafarroa, fue declarado parque natural en 1994 y es una de las más importantes zonas de montaña por su extensión.

La prehistoria de Euskal Herria se conserva aquí. Más de sesenta dólmenes, túmulos, cromlechs y menhires se contabilizan en Aralar, el amplio parque natural que comparten Gipuzkoa y Navarra.

En el Sudeste del territorio guipuzcoano, prolongándose en la Comunidad Foral de Navarra, el macizo calcáreo de Aralar supone una de las áreas montañosas más destacadas de Euskadi, en altura y extensión. También en cuanto a sus valores ecológicos, su patrimonio megalítico y su uso agropecuario: Aralar es la zona de pastoreo más importante de Gipuzkoa, con protagonismo de la oveja latxa.

La silueta aislada del monte Txindoki (1.331 metros) es punto de referencia para montañeros y senderistas, que cuentan con un sinfín de pequeños y grandes recorridos balizados mediante los cuales adentrarse en los paisajes del parque natural, con puntos singulares como el escarpado ‘domo de Ataun’, el hayedo de Akaitz o el circo glacial de Pardelutz.

Situación: Situado en el área suroriental de Gipuzkoa, el parque se extiende también por la vecina comunidad de Navarra. La parte guipuzcoana se enclava en los términos municipales de Ataun, Zaldibia, Abaltzisketa, Amezketa, Lazkao,Tolosa y las tierras de la Mancomunidad de Enirio-Aralar.

Flora y Fauna:
Sobre el parque de Aralar suelen volar buitres leonados, alimoches, águilas reales y hasta quebrantahuesos. El visón europeo y el hocicudo, junto al corzo y el jabalí, son algunas de las 147 especies de vertebrados catalogadas. Conforme crece la altitud, los encinares y robledales de Aralar dejan paso a los hayedos y roquedos.